Locaciones celebres de Venezuela

Hato Piñero, Cojedes, Venezuela

          Hato Piñero es una extensión de unas setenta y cinco mil hectáreas ubicada en la región central llanera, específicamente en el sur-este del estado Cojedes. No puede afirmarse que estas tierras sean llanuras propiamente dichas  aún cuando pertenezca a la región de los llanos puesto que las planicies se ven coronadas por montículos y colinas que conforman el Macizo del Baúl y lo que, sin lugar a dudas, le agrega un atractivo especial.

             En sus dominios puede apreciarse una gran diversidad de animales, pero entre los que más llaman la atención debemos mencionar los ciervos y venados que pueden ser observados a pocos metros de distancia, esto teniendo en cuenta que hoy en días en Venezuela es prácticamente imposible observar a estos animales en su ámbito natural debido a la caza indiscriminada. Sin embargo, Hato Piñero puede brindarnos esta oportunidad.

             En el siguiente video les dejamos una prueba de lo expuesto:

             Recientemente este hato pasó a manos del estado venezolano. No obstante, lo que fue y aún es hoy en día se debe al trabajo de sus anteriores dueños, la familia Branger, específicamente Antonio Julio Branger, quien desde la década de los años sesenta cambió la visión del destino que hasta entonces se venía dando a la región llanera, por uno que permitiera la protección de la flora y la fauna y la coexistencia de la producción ganadera. Legado que se mantiene en la actualidad, por lo que constituye en gran refugio para una variada gama de especies vegetales y animales.

 

           Nuestra visita formó parte de una actividad de campismo organizada por la Gobernación del Estado Cojedes, lo que nos permitió pernotar tres días en el hato. 

          Si vamos en vehículos descubiertos una de las cosas que notaremos es el polvo de la carretera, de manera que lo más probable es que arribemos a las instalaciones del Hato cubiertos de polvo, como en nuestro caso. No obstante, el sacrificio vale la pena. 

      

           Las instalaciones permanecen perfectamente conservadas. La paz que se respira invita a colgar el chinchorro, y los alrededores esperan colmados de bellezas para compartir con el visitante. Vale señalar que existe un hotel con todas las comodidades, gestionado por Venetur, aunque dos mil quinientos bolívares por noche tal vez sea para pensárselo bien.